El proyecto consiste en el desarrollo en las islas de la Macaronesia de un programa de aplicación de nuevas tecnologías en el campo de la medicina de emergencia en tres líneas claramente diferenciadas pero íntimamente interrelacionadas, como son el diseño e instalación de un programa de desfibrilación precoz apoyado en la implantación de desfibriladores semiautomáticos (DEA), en ambulancias de soporte vital básico (ASVB) y postes de emergencia sanitaria en sitios de gran afluencia de público; la transmisión de señales biofísicas (electrocardiograma, frecuencia cardiaca, etc) desde dos puntos geográficos equidistantes y la elaboración de una historia clínica informatizada en asistencia extrahospitalaria.